Mis hermanos y mis hermanas
hoy me gustaría de meditar con usted a respecto, acerca de los caminos y
nuestras entregas. Primeramente vamos a ver lo que significa camino y luego
veremos lo que realmente es una entrega segura. Cuando pienzamos en cmino es manera
natural imaginar un camino o incluso un sendero donde se puede caminar. Es por
esto y incluso andando por un camino o sendero significa caminar. O sea: Dar
los pasos en un camino. Pero todavía se une a esta idea y camino. En otras
palabras: El camino o la ruta de acceso es el lugar para donde va y viene. Cuando
caminamos nosotros estamos indo o venindo. Pero en el caso de la vida sólo
vá. La caminata es unidireccional. Hay un chiste serio que dice: el taxi de
viaje solamente alrededor de la casa funeraria sólo vá. Adiós definitivo aquí
hay en este mundo.
Pero volvamos a la senda del
tema: En la vida hay varios caminos y vivir consiste en estar en muchos de
ellos. Pero, ¿cómo? Porque en este caso será en un sendero medio viviendo una
situación en la vida. Caminar en la vida es lo mismo que vivir. Y mientras
vivimos caminamos. Pero en la vida camino también puede ser una situación en la
que estamos involucrados. Por eso dije que hay varias maneras que podemos ser.
Sí, porque podemos tener al mismo tiempo, varias situaciones en las que estamos
involucrados. Algunos "rutas" son difíciles y conseguimos molestarnos
con ellos. No sabemos qué hacer. Estas son las situaciones que vivimos y que
necesitamos salir de ellos. Pero sabemos que no tenemos las condiciones para la
salir. ¿Qué hacer entonces? Tenemos que entregar estas situaciones a Dios. El
salmista es sabio para decirnos: Ddar
tu camino al señor. Confiar en Él y Él sabrá
como lo hará. Pero hay algo aquí que no he hablado. ¿Que? La confianza. No es
suficiente entregar sólo una situación en las manos de Dios. Es necesario
confiar en Él. Cuando entregamos algo en nuestro caminar (vida) en las manos de
Dios nosotros necesitamos tener confianza que Él resolverá el problema. No hay
nada peor que entregar una situación a alguien para resolver y no tener
confianza en esa persona. Esto equivale a poner en duda la capacidad de la
persona. Bueno, eso sería mejor luego no entregar nada ya que no creemos, no
confiamos que esa persona es capaz de hacer lo que esperamos que se haga.
En el caso de nuestra relación
con Dios no es diferente. Tenemos que confiar en que Él es infinitamente capaz
de resolver, porque Él es Dios y puede hacer todas las cosas. ¿Has dado todo en
las manos de Dios? Así esperamos confiados.
Él atuará. Amén.
Reverendo Jesué Francisco
da Silva.
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